Como todos sabemos, hoy hemos conocido una decisión que era esperada por muchos de nosotros: Gallardón no irá en las listas del PP en las Elecciones Generales. Era de esperar que Aznar no lo haya seleccionado. Y digo Aznar, porque Mariano Rajoy es una marioneta pepera de Aznar. Ahora encajan todos los puntos. Aznar ha puesto la zancadilla a Gallardón, el mejor político del Partido Popular (el único político moderado de centro derecha) y con esta acción se declara públicamente la identidad política de este partido: extrema derecha retrógrada, “la derechona”.Lo que ha sucedido en estos últimos días es una pugna por el poder en el PP, una lucha encarnizada por suceder a Rajoy, que buen batacazo se llevará el 9-M. Pero la sorpresa ha sido la siguiente: Esperanza Aguirre quería dejar la Presidencia de Madrid. Esta “mujer”, perteneciente al ala “fascista” del partido, a la extrema derecha dura, también pretendía suceder a Rajoy y se ha dado con un canto en los dientes, porque no ha podido. Ninguno ha sido incluido.La derrota ha sido para Gallardón, uno de los políticos mejores valorados por la ciudadanía española, y, a mi entender, el mejor político del PP. Gallardón ha sido derrotado y sus sueños frustrados, ¿para que? Muy sencillo, para que la esposa de Aznar, Ana Botella, ocupe el cargo de Alcaldesa de Madrid sin haber sido electa por el pueblo.Si yo fuese un ciudadano madrileño votante del PP, me habría sentido traicionado, pues habría votado a Ruiz Gallardón, no a Ana Botella.Con esto señores, podemos ver claramente quien dirige el cotarro: Aznar y su esposa.